31 diciembre 2010

DOCE

1. Pau
2. Irene
3. Javi
4. Alba
5. Juan
6. Dani
7. Aitor
8. Quique
9. Eva y Carlos (vais en pack, como siempre)
10. Cris
11. CrisMu
12. Kris
Doce uvas. Doce momentos para pensar en las doce (bueno, trece) personas con las que quiero compartir este 2011.
Gracias por formar parte de mi vida.

CARTA SIN DESTINO

"A veces, siento un gran vacío en mi interior; un vacío que, por momentos, parece quemarme. Creo que si acercaras tu oído a mi corazón, probablemente, oirías el mar.
Sigo soñando con ser completo, con no acostarme cada noche deseándolo pero, aún así, en ocasiones, cuando la brisa es cálida y los grillos cantan, sueño con un amor que el tiempo respete y perdure. Sólo deseo que alguien me quiera, que cuide de mi.
No sé. Quizá ya tuve mi felicidad. Me niego a creerlo pero no existe ese hombre. Sólo la luna."
[Carta de Sally a Gilly en Prácticamente magia.]

Cuando quieres a alguien, hay veces que, en lugar de hacer lo que querrías, haces lo que piensas que es correcto, lo que crees que el otro necesita. Y eso no quiere decir que compartas su decisión o que la entiendas. Pero la respetas... aunque duela.

30 diciembre 2010

GANAS

Ganas del día a día. No me importa que sea 2010, 2011, 1672 o 2834. Tengo ganas de vivir, de seguir descubriendo gente, de seguir riéndome con las cosas más simples y de intentar hacer de este mundo un lugar algo más sonriente.
Detalles, momentos, personas, regalos, viajes, abrazos, miradas, sonrisas, tiempo, conversaciones,... Tengo ganas de ser feliz. Y, con personas como vosotros a mi alrededor, es realmente complicado no serlo.
Gracias por este año, por los anteriores y por los que vendrán.

23 diciembre 2010

SENTIMIENTO NAVIDEÑO

Cierto que la Navidad puede ser muchas cosas. Puede que el consumismo nos ataque y que muchas sonrisas que pueblan las calles sean falsas. También hay personas para las que la Navidad no significa nada aparte de unos días más tranquilos que el resto del año.
Pero, personalmente, me parece que la actitud de muchas personas cambia. Lo que me gusta de la Navidad es que parece que, ese esfuerzo que durante el resto del año no se hace, en esta época surge y aparecen mil planes. Ese "ya quedaremos" tan típico, en Navidad se vuelve realidad. Y a esa gente que hacía tiempo que no veías o con la que no encontrabas el hueco adecuado para coincidir, tiene un espacio en Navidad. Porque tanto tú como la otra persona siente que es el mejor momento para quedar.
Navidad puede tener muchas cosas por las que parecer falsa, sinsentido, luces que nos ciegan, escaparates barrocos, frío... pero la Navidad tiene encuentros y reencuentros. Y eso es lo que hace que, al menos, mi Navidad sea especial.
Quiero seguir encontrándome y reencontrándome bajo las luces de Madrid.

13 diciembre 2010

CÍRCULOS DE CONFIANZA

Hay personas que te sorprenden. Otras que te decepcionan.Otras que están en otro país, en otra ciudad...pensando en ti de vez en cuando. Otras que existen sólo a través del teléfono o, incluso, del tuenti. Otras con las que compartes la misma mesa en clase sin ni siquiera compartir un "hola". Otras con las que sí compartes ese "hola". Otras que están en la sombra. Otras que están muy presentes, día a día, dándolo todo porque seas feliz; que ves cada día, con las que compartes tus preocupaciones, tus ganas de comerte el mundo, tus problemas con los profesores, tus rayadas amorosas...
Tu "círculo de confianza", tu endogrupo... está compuesto por aquellos que te quieren. Hay alguno que está en la sombra, pero suele ser una persona, dos a lo sumo...porque el resto de los que están en la sombra, han llegado a estar en la oscuridad y no saben cómo alumbrarse para volver a ti. Alguno lejano quizá podría formar parte de él... pero es complicado si hay distancia de por medio.

El círculo palpable es el que está ahí día a día: a quienes les cuentas tus problemas, con quienes te apetece quedar los fines de semana, aquellos a quienes te apetezca llamar cuando ya estés saturado de estudiar, quienes te dan un abrazo en el momento en el que te ven triste o cansado, quienes te dan la palmada de ánimo en la espalda cuando ya no puedes más...
Es bonito tener amistades... pero las amistades hay que cuidarlas. Y ésa es una tarea que no es, ni será nunca, fácil.

08 diciembre 2010

MI ABUELA

Cuando, por alguna razón, me piden que piense en una persona a la que admiro, pienso en mi abuela. Mi abuela es la típica abuela regordeta y bajita, con el pelo blanco como la nieve y que te pone comida hasta que estés a punto de explotar. Y, como guinda del pastel, manda mensajes, escribe en Word, retoca fotos con Picasa y manda emails con presentacions de Power Point. Además, hace mil cursos: Internet, gimnasia de mantenimiento, ganchillo, yoga, coro, historia de España y no sé cuántas cosas más.
Ella consigue fuerzas donde no hay apenas espacio para respirar. Tras la muerte de su hijo, ha seguido teniendo la vitalidad de un niño pequeño y las ganas de cualquier adolescente de comerse el mundo. Si llego a las dos de la madrugada a su casa, noto que se levanta de la cama para darme las buenas noches y, si no tenemos sueño, nos quedamos hablando en el sofá del salón hasta bien entradas las tres. Ella es una persona increíble, con la fuerza de un ciclón para crear una familia a la que me siento orgulloso de pertenecer, sobre todo, si está ella.