PROYECTOS

Tantas ganas, tanta ilusión, soy tan feliz con lo que quiero comenzar este año.
Sigo con una carrera que cada día que pasa me apasiona más.
Seguiré con muchas más ganas que el año pasado en un centro juvenil en el que me siento querido y valorado.
Empezaré un curso de coordinador para poder acercarme más todavía y educar mejor a los chavales que me rodean.
Retomaré el teatro y este año no sólo con clases de interpretación, sino también de técnica vocal, expresión corporal e historia del teatro.
Tengo muchas ganas de vivir este año, de ver que me depara el día a día y poder exprimirlo al máximo.
Creo que esto es felicidad. ¡Qué sensación tan maravillosa!

¿MINUSVÁLIDOS?

Creo que la gente tiene un concepto equivocado de los minusválidos. Analicemos la palabra: minus-válido; vale menos.

De acuerdo. Ahora veamos de dónde viene esto.

Hay personas que son deficientes. Una deficiencia sería un problema físico que nos impide realizar la vida con normalidad. Por ejemplo, ceguera, sordera, ser manco, cojo,...

Una vez ha quedado esto claro, de ahí surge la discapacidad, es decir, estar menos capacitado, tener una capacidad menor que el resto de personas y que, por tanto, provoca que la vida sea más complicada. Así, la discapacidad sería no poder ver, no poder oír, no poder andar como el resto de la gente...

Vale. Deficiencia provoca discapacidad.

Centrémonos ahora en la minusvalía. ¿Por qué les llamamos minusválidos? Un minusválido lo es porque la sociedad le obliga a serlo. Las personas no nace minusválidas, nacen deficientes y posiblemente discapacitadas.

Si los ciegos tienen un mundo adaptado, no tienen porqué ser minusválidos: objetos con braille, semáforos con sonidos, pavimento con diferentes texturas,...

Si los sordos tienen una lengua de signos, un muñequito que parpadea y les indica que tienen que cruzar rápido, un intérprete que les traduzca lo que se dice en la tele, tampoco son minusválidos.

Si fundamos nuevos trabajos que ayuden a las personas que van en silla de ruedas, a la multitud de personas que tienen las llamadas "enfermedades raras", a las personas con Síndrome de Down, de Williams, de Evans, de Duane, de Kocher,... En resumen, a la gente que necesita ayuda para desenvolverse con naturalidad en su día a día, no los llamaríamos minusválidos.

Personalmente, me parece denigrante la palabra "minusválido" para referirnos a aquellos que son igual de válidos que nosotros. Con sus dificultades pero que, con ayuda, podrían ser paliadas y con la que podrían ser más felices.

Es utópico pensar que los discapacitados dejen de ser minusválidos. Pero, poco a poco, podemos mejorar su calidad de vida e intentar que sean más felices.

ALEGRÍA

Alegría, come un lampo di vita.
Alegría, come un pazzo gridar.
Alegría, del delituosso grido, bella rugente pena.
Seren, come la rabbia di amar.
Alegría, come un assalto di gioia.

Alegría, I see a spark of life shining.
Alegría, I hear a young minstrel sing.
Alegría, beautiful roaring scream, of joy and sorrow.
So extreme, there is a love in me raging.
Alegría, a joyous, magical feeling.

Alegría, como la luz de la vida.
Alegría, como un payaso que grita.
Alegría, del grito estupendo, de la tristeza loca.
Serena, como la rabia de amar.
Alegría, como un asalto de felicidad.

["Alegría" del Cirque de Soleil]

PALAHNIUK II

Ese hombre sigue siendo mi mayor influencia literaria.
Tiene libros peores y mejores; pero todos tienen un estilo muy personal, unos personajes estrambóticos y desequilibrados, una pluma ágil, unos comentarios sarcásticos (incluso dañinos) y unos finales sorprendentes.
"Snuff" ha sido su última novela traducida al español y ha vuelto a ser una sorpresa en muchos de sus puntos.
Dejo sólo algunas de las muchas frases que tiene este contemporáneo no tan conocido:

- Cada uno de nosotros puede hacerse con el control del mundo.

- Debes tener en cuenta la posibilidad de no caerle bien a Dios. Pudiera ser que Dios nos odiara. No es lo peor que podría ocurrir.

- Lo que posees, acabará poseyéndote.

- Generaciones y generaciones han desempeñado trabajos que odiaban para poder comprar cosas que no necesitaban.

- No somos especiales. Tampoco somos escoria o basura. Simplemente, somos. Somos y ya está, y lo que pasa, simplemente, pasa.

- El arte nunca nace de la felicidad.

- Hacedme el enorme culo pasivo de vuestra orgía de culpa. Me dejaré follar por todos.

- La Ilustración se terminó. Ahora estamos viviendo en la Des-Ilustración.

- No tengo corazón ni puñetera falta que me hace. No vais a hacerme sentir nada. No vais a conseguir afectarme. Soy un cabrón estúpido, insensible y calculador. Fin de la historia.

- Tal vez no va uno al infierno por las cosas que hace. Tal vez se va al infierno por lo que no se hace, por lo que no se termina.

- Todos los sitios son el mismo sitio en la oscuridad.

- No importa lo mucho que quieras a alguien, siempre quieres que las cosas se hagan a tu modo.

- Todas esas curas y remedios que aseguran cien por cien natural y, por tanto, cien por cien sanos. El cianuro es natural. El arsénico, también.

- Pero seguimos aquí sentados, esperando a que nos salven. Mientras todavía somos víctimas, confiando en ser descubiertos mientras todavía sufrimos.

- ¿Cuando dejó el futuro de ser una promesa para convertirse en una amenaza?

- Cuando huyes de algo, sólo consigues que permanezca más tiempo contigo. Cuando luchas contra algo, ese algo se vuelve más fuerte.

- No hace falta más que una sola equivocación, y ya nada de lo que hagas importa.

[Extracción de diferentes libros de Chuck Palahniuk: "El club de la lucha", "Asfixia", "Nana", "Rant. Historia de un asesino", "Monstruos invisibles", "Fantasmas", "Snuff",...]

FIN DEL VERANO

He podido vivir tantas cosas este verano. Tantos recuerdos.
Un viaje a Amsterdam, un campamento en Pirineos, Cheste, Portaventura, barbacoas en Las Rozas o en San Agustín que terminan en piscinas nocturnas, tantas noches en mi casa bebiendo, jugando al singstar, al trivial disney, con Borja y Cris, con Alba y Danlee, con Laura, con Dani,... mucha gente en mi casa durmiendo y despertando, riendo y disfrutando.
Noches locas que se nos ocurre ir al Escorial, a las fiestas de Matalpino, a las de Sanse, a las de Majadahonda, con borrachos en Avenida de Brasil o simplemente haciendo el pavo donde sea (y, normalmente, acabando en mi casa).
Muchos sentimientos, muchas sonrisas y un agradecimiento infinito a todas las personas que han hecho que sea posible que este verano sea inolvidable.