25 agosto 2011

CHESTE

Aunque el campamento terminase el día 15 y no haya tenido tiempo de escribir, se merece unos minutos.
Porque te das cuenta de todo lo que se consigue con tan sólo 15 días, porque ves quienes son los niños que realmente necesitan un campamento, porque los monitores del campamento se esfuerzan en conseguir que sus vidas sean mejores al menos durante esa temporada, porque el sitio es un lugar perfecto para que ellos puedan desconectar de su día a día, porque Cheste está preparado completamente para ellos, porque no hay un minuto de descanso, porque la preocupación, la dedicación y la atención es continua... porque es genial que sigan existiendo personas que quieran luchar por este tipo de causas.
Gracias, porque he aprendido mucho tanto de los niños como del resto de monitores. Es tan alucinante ver que hay corazones tan grandes en el mundo que me empuja a seguir esforzándome por quien más lo necesita que, en ocasiones, coincide con que es quien menos lo merece.

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