Ordenando todos los cuadernos que tengo, he descubierto algo que me ha sorprendido. Poemas de mi madre cuando tenía mi edad.
Ella escribió un relato para mí que, hasta ahora, yacía olvidado en un cuaderno azul.
"Verte es mi mayor placer.
¡Al verte, la imaginación en mí, hace las veces de mago!
Para ti, yo tengo cuentos de magos encantadores, de palacios de esmeraldas con puertas de oro y bronce por donde entrará la dicha.
Tengo góndolas galantes con música de ilusiones, castillos junto a las nubes que dominan los paisajes.
Miles de elefantes blancos, con bellos adornos de flores.
Te contaré que hay princesas, que se duermen por las noches, por un dulce encantamiento en el cáliz de las flores.
Te diré mil cosas bellas, que aprendí ¡ya no sé dónde! para que pases la vida en un sueño de ilusiones."
A veces, olvido lo que mi madre ha dado por mí. Pero, cosas como ésta, me hacen recordar la belleza que está en el interior de mi madre, aunque no siempre salga a relucir.
No hay comentarios:
Publicar un comentario