Hoy te toca a ti. Hoy es para ti. Llevamos unos cinco años siendo amigos y creo que es la primera vez que escribo sobre ti. Ya era hora.
Cuando me conociste, yo era ese chaval insoportable que te perseguía a todas partes. El chico "heavy beatle pervertido", ya no recuerdo muy bien el porqué de esos tres adjetivos pero con la coña empezamos a hablarnos más, a acercarnos el uno al otro. Fue entonces cuando empecé a tener una amistad de las de verdad. Pasamos muchas cosas juntos pero la primera importante fue esa acampada de navidad en la que no había quien te aguantase y, aun así, yo te perseguía. No sé cuantas veces me mandaste a la mierda en esos días. Y después de esa, muchos momentos más: el día que salimos Mary, tú y yo (un poco desastre, sí, pero lo recuerdo con cariño), el día que plantamos a Laura en Francos Rodriguez (tambien fue un día de mierda pero luego en el banco de La Pampa...), el día que Elena, tú y yo fuimos al zoo (ese día no tiene ningún pero, ¿verdad?), el día que estuvimos comiendo en el XXL y luego dormimos en mi casa (no te quejes de la foto, ¡eh!), el día que me sorprendiste diciendo que fuesemos a cenar al Vips (ese día sí que fue grande), el día que me llamaste diciéndome que si podíamos quedar y al final acabamos con dos frapuccinos gratis en el Starbucks de Atocha, todos los ensayos de Sueños, verte emocionada cuando terminaba de cantar en los musicales (creo que siempre ha habido una canción que te ha emocionado), el día que estuvimos en mi ático jugando al Jungle Speed (maravilloso juego donde los haya),y tantos puntos suspensivos...
No sé. Nos vemos una vez al mes y si eso (y ahora que voy a empezar Teatrosa y los viernes salgo a las nueve y tal, menos que nos vamos a ver) pero me encanta quedar contigo. Sigo considerándote uno de mis pilares cuando me voy a derrumbar. Porque te quiero y porque te lo has ganado con creces. Hay cosas que seguimos sin saber el uno del otro pero eso es lo bonito, ¿no? Así, siempre tendremos una excusa para tomarnos un cascorro más en el Tranvía o un frapuccino gratis en Atocha (de hecho, Teatrosa está en Atocha, umh...)
Te quiero. Tal y como eres, con tus virtudes y tus defectos. Sé tú. No pierdas la fe en el amor. Se te van cayendo creencias pero te tendrás que agarrar a algo, ¿no? Ese algo puede ser el amor y tienes una gran prueba de que existe y es que yo, sin duda alguna, te quiero.
Y lo nachos del XXL tb fueron gratis :P
ResponderEliminary de la foto aunq kisiera kejarme no puedo xq no tienes muxas mias XD
asiq no pasa na.
va ha ser un año complicado xa vernos, pero siempre estaras conmigo.
TKM!